Consejos veterinarios en la prevención de problemas por espigas

La primavera es una época estupenda para disfrutar de la naturaleza con nuestros perros, pero debemos tener algunas precauciones, por ejemplo con las espigas...

Las espigas, que todos conocemos, son inflorescencias de determinadas plantas y tienen aristas. Así, se adhieren a casi cualquier parte del cuerpo, no sólo el pelo, también en el interior de orejas, párpados, boca, espacios interdigitales y otras aberturas naturales. Si se introducen en estas partes, provocan lesiones que pueden llegar a ser graves y necesitar atención veterinaria. 

Para evitar llegar a esta situación, la prevención es fundamental y está al alcance de los propietarios, siendo esencial: 

1) Evitar pasear con los perros por zonas con abundancia de espigas, 

2) Después de cada paseo en zonas donde pueda haberlas (por ejemplo el parque dónde vayamos con regularidad, excursiones al campo), o al menos una vez al día, revisar que no tenga ninguna prendida, 

3) Peinar a nuestro perro a diario, además de ser muy conveniente, ayuda mucho a retirar posibles espigas y otros cuerpos extraños, 

4) Si notamos ciertos síntomas, como por ejemplo un párpado cerrado y lloroso, la cabeza ladeada hacia un lado y molestias al tocarle la oreja agachada, lameteos excesivos en las patas, especialmente entre los dedos, inflamación y/o fístulas en alguna parte de su cuerpo, acudir a vuestro veterinario.

Recordad que las medidas preventivas son siempre la primera y mejor solución, estando a nuestro alcance.